El trabajo de Gulnur Ozdaglar, es un sueño ecológico hecho realidad, a primera vista sus creaciones parecen demasiado delicadas para ser verdaderas. El toma un material tan común como el pet de las botellas de plástico, lo perfora pacientemente a mano y lo transforma en piezas de belleza cautivadora, delicada joyería, objetos decorativos que te sumergen en la vida submarina.
Medusas fuera del agua que ni pican, ni pierden su misteriosa belleza.
2 comentarios:
Es un trabajo precioso y refleja mucha sensibilidad.
No lo conocía.
Se queda en mi archivo para prepararle un post en mi blog de reciclaje.
Gracias
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